EPUNTO Interim Management

La revolución en Nepal y el interim management en la política. Aprendizajes y paralelismos

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La reciente crisis en Nepal, que desembocó en protestas masivas lideradas por jóvenes a causa de la imposición de restricciones en redes sociales en un contexto de corrupción y desempleo, ha culminado con la renuncia del primer ministro y el nombramiento de una figura de consenso: Sushila Karki, primera ministra interim, que asume el cargo para organizar elecciones y restaurar la normalidad hasta marzo de 2026, cuando se celebrarán elecciones.

Sushila Karki ha sido elegida mediante una llamativa votación en Discord —la conocida plataforma de comunicación con origen en el mundo del gaming— principalmente por una juventud que salían con la misma fuerza y determinación a derrocar al régimen de su país que a limpiar las calles días después.

Todo esto, nos deja algunas reflexiones interesantes, pero considero que la principal es como se ha logrado un tándem perfecto entre la motivación del talento joven del país y la experiencia de personas senior como Sushila, expresidenta del Tribunal Supremo.

Estabilizar y articular prioridades: la función esencial del interim management

Frente a escenarios que pueden recordar al anteriormente mencionado, la figura de un interim manager ofrece ventajas concretas que pueden trasladarse al ámbito empresarial cuando se requiere una solución rápida y sólida ante crisis internas. La instauración de una autoridad temporal, con credenciales de neutralidad y conocimiento técnico, facilita la gestión de urgencias, ofrece un punto de referencia claro para la sociedad y permite preparar el calendario con el fin de conducir a una nueva etapa con mandato democrático. De esta forma, en el plano corporativo, un directivo temporal cumple funciones análogas: estabiliza, articula prioridades y prepara el terreno para el relevo o la normalización estratégica.

Legitimidad y confianza inmediata

Una de las lecciones más útiles que se pueden extraer de las revueltas en el país asiático es la necesidad de legitimidad y confianza inmediatas. En Nepal, la designación de una figura reconocida por su trayectoria buscó generar confianza entre actores diversos —el Ejército y los jóvenes sublevados, principalmente— y acelerar acuerdos básicos de gobernabilidad.

Esa reputación es la que, en una empresa, aporta un directivo temporal con recorrido profesional probado para negociar con stakeholders, calmar tensiones y restablecer operaciones. La limitación legal y práctica de los gobiernos temporales (al, por ejemplo, evitar reformas estructurales profundas y al priorizar la continuidad administrativa) también sirve como recordatorio: las medidas del interim manager deben centrarse en estabilizar y preparar, no en reestructurar sin mandato.

“Un interim manager con una correcta cobertura y soporte actúa de puente: canaliza la energía transformadora de los equipos y aplica el rigor necesario para que los cambios se implementen con seguridad y sostenibilidad”

La movilización juvenil en Nepal ha puesto de manifiesto demandas de futuro, empleo y transparencia. En las organizaciones, por otro lado, la presión del talento joven a menudo exige adaptación, traducida en más transparencia, propósito y oportunidades; mientras que los profesionales sénior son capaces de aportar experiencia, juicio y capacidad para gestionar riesgos.

Mandato acotado y medición de resultados

Sin embargo, no hay que olvidar que la temporalidad con objetivos claros es clave, ya que, en la administración de países, el líder temporal tiene la obligación de convocar elecciones y garantizar procedimientos. Igualmente, cualquier servicio de interim management debe tener un mandato acotado por objetivos, plazos y métricas que permitan evaluar su contribución. Esa estructura, precisamente, facilita la rendición de cuentas, permite medir resultados y deja un legado operativo —procesos, gobernanza y equipo formado— que perdura cuando los directivos permanentes retoman el mando.

Liderazgo temporal para crisis complejas

La experiencia reciente subraya la utilidad de soluciones interinas: legitimidad rápida, neutralidad para mediar, capacidad para organizar la transición y dejar pilares operativos firmes. En el entorno empresarial, disponer de servicios de interim management con estas características permite abordar crisis extremas o transiciones sensibles con mayor probabilidad de éxito y menor coste reputacional.

En resumen, este caso es una evidencia más de que la utilización de directivos senior de forma temporal es una decisión que garantiza estabilidad y experiencia desde el primer momento. En EPUNTO disponemos de una red de más de 60.000 distribuidos en decenas de países, permitiéndonos encontrar al mejor perfil en menos de 10 días.

Álvaro Petit— Business Coordinator & Brand Manager

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